Adiós al frizz: consejos para el cuidado del cabello encrespado
Mi pelo es liso. Realmente suave. Generalmente solo uso mi plancha alisadora para intentar crear volumen y/o rizos en mi cabello. Generalmente en vano, porque parecen estar completamente satisfechos con su estado ultrasuave y no quieren cambiar nada al respecto. No es de extrañar que normalmente mire con envidia a todas las personas con rizos naturales. Pero aquellos de ustedes probablemente ahora se quejarán y se preguntarán si todavía tengo todas las tazas en el armario. Porque, como ya he aprendido por las quejas de varios amigos, el pelo encrespado no es divertido. Muy pocas mujeres están naturalmente bendecidas con la melena de rizos de ensueño que vemos en la publicidad. La mayoría de las veces se trata de un frizz indefinido que rápidamente aparece seco y pajizo, pero que aún así explota literalmente a la primera señal de humedad y, por lo general, es difícil de domar. Pero como suele ocurrir cuando se trata de belleza, este tipo de cabello también se puede combinar con el cuidado adecuado y algunos consejos y aprende a manejar los trucos.
El cabello encrespado, por ejemplo, no tolera el lavado frecuente, ya que esto elimina los aceites naturales que se supone que cuidan el cabello y lo protegen de la resequedad. Para lavarte el cabello utiliza champú y acondicionador específicos para cabello seco porque aportan mucha hidratación. Probablemente desearías poder dejar que tu rizo natural se seque al aire libre, pero desafortunadamente tu tipo de cabello no responde bien a eso. Al exponerse al aire, la capa de cutícula del cabello se abre y penetra la humedad, lo que provoca el famoso frizz. Es mejor secarse el cabello con secador ya que el aire caliente cierra la cutícula. El cabello encrespado necesita cuidados especialmente intensivos para mantenerlo hidratado, especialmente en invierno, cuando el aire seco pasa factura al cabello. Por ello, conviene utilizar una mascarilla capilar hidratante al menos una vez a la semana. Los aceites capilares también son ideales para el cuidado, ya que suavizan la estructura del cabello y reducen el encrespamiento. En general, lo mejor es utilizar productos de cuidado sobre el cabello mojado, ya que el agua es un medio de transporte de los principios activos hidratantes.
El conocido consejo “100 pinceladas” funciona de maravilla para el frizz. El cepillado distribuye los aceites naturales del cuero cabelludo por todo el cabello, proporcionándole una hidratación óptima. Sin embargo, no le harás ningún favor a tu cabello encrespado con un cepillo clásico porque solo aumentará el encrespamiento. Para domesticarlo, es mejor utilizar un peine de dientes anchos o el llamado Tangle Teezer.
La humedad es el enemigo natural del cabello encrespado. Para pasar el día sin frizz, no debes salir de casa sin algunas herramientas. Un paraguas no es suficiente para proteger contra la humedad porque la humedad se acumula debajo. Lo mejor es llevar sombrero o gorra cuando llueve. Si quieres estar segura, lo mejor es tener siempre en el bolso una crema anti-frizz que puedas utilizar para domar tu cabello a lo largo del día.