Envejecimiento digital: ¿La luz azul nos hace viejos?
La luz azul es una forma de luz visible que tiene una alta densidad de energía. De ahí la abreviatura HEV, que significa “alta energía visible”. La luz azul forma parte del espectro luminoso del sol, pero también la producen principalmente dispositivos electrónicos y lámparas LED. Dado que pasamos muchas horas al día frente a nuestros teléfonos inteligentes, portátiles, etc., estamos expuestos a niveles más altos de radiación HEV. Estudios recientes muestran que la luz azul puede provocar el llamado envejecimiento digital, es decir, el envejecimiento prematuro de la piel debido a pasar demasiado tiempo frente a dispositivos digitales.
¿Qué tan dañina es la luz azul para la piel?
¿Qué tan dañina es la luz azul que parpadea en nuestras pantallas todos los días? Como suele ocurrir, también en este caso es la dosis la que produce el veneno. La luz azul natural que emite el sol no es un problema, al contrario: la luz azul hace que el cuerpo libere hormonas de la felicidad. Esto se puede ver, por ejemplo, en el hecho de que nos resulta mucho más fácil levantarnos en verano, cuando amanece temprano, que en el oscuro invierno. La luz HEV es responsable de esto. Pero la luz azul también tiene sus desventajas. Al igual que los rayos UVA, la luz azul también penetra las capas más profundas de la piel. Las investigaciones muestran que puede causar un mayor daño en la piel causado por los radicales libres y la pigmentación.
Los radicales libres son moléculas de oxígeno que destruyen las estructuras celulares y, con ello, la formación de colágeno y elastina en la piel. Dado que el colágeno y la elastina desempeñan un papel clave en la apariencia juvenil de la piel, este estrés oxidativo provoca un envejecimiento prematuro de la piel. El resultado son arrugas y una apariencia general de piel flácida.
Pero la luz HEV también tiene un impacto negativo en la piel de forma indirecta: si miras la pantalla de tu teléfono móvil durante mucho tiempo antes de acostarte, la luz azul despierta tu cerebro. El resultado puede ser la falta de sueño, lo que a su vez es perjudicial para la piel. Necesita dormir de siete a ocho horas cada día para regenerarse lo suficiente.
¿Cómo puedes protegerte de la luz azul?
Aunque sólo los niveles altos de luz HEV tienen efectos negativos en la piel, existen algunas medidas que puede tomar para protegerse de los rayos azules. Por ejemplo, debería cambiar permanentemente su teléfono inteligente al modo nocturno y, en general, reducir el brillo de todas las pantallas utilizadas. Esto no sólo es mejor para la piel, sino que también protege los ojos. Si quieres estar seguro, utiliza protección solar. Pero debería ser una parte integral de tu rutina de cuidado de la piel de todos modos, no sólo si miras mucho la pantalla.
Además, los efectos potencialmente negativos de la radiación HEV se pueden prevenir mediante el uso de ingredientes activos adecuados en el cuidado de la piel. Por ejemplo, la vitamina C combate los trastornos de pigmentación, mientras que el retinol favorece la regeneración de la piel y, por tanto, combate el envejecimiento prematuro de la piel.